Xalapa, Ver
La llegada de un bebé a casa es un cambio radical para lo cual debemos estar preparados, por esta razón, recopilamos algunos consejos para que los nuevos padres estén preparados en el cuidado de su pequeño durante las primeras semanas y meses.
Algunos consejos que te guiarán en el cuidado de tu pequeño son los siguientes:
Debes escuchar a tu bebé, ya que debemos poner atención en las necesidades del pequeño, aunque generalmente los demás quieran decirnos qué hacer, más vale ir adquiriendo experiencia propia en el cuidado y la atención de nuestro pequeño.
Atiende siempre sus necesidades, los bebés necesitan de los padres, ya que deben atenderse sus necesidades físicas y emocionales, sin temores absurdos a que se malacostumbren a los brazos, al contrario, los brazos son una necesidad básica para los bebés, al igual que comer y dormir.
Sé paciente, pues nadie nace sabiendo ser padres, y la crianza se va desarrollando a medida que nuestro bebé va creciendo. Así que no te exijas demasiado y sé paciente contigo y con tu bebé.
Ten confianza en ti, al igual que lo anterior, debemos ganar confianza como padres, pero esto se va generando de manera gradual.
Escucha tu instinto y confía en tus capacidades para hacer las cosas.
Puedes pedir ayuda, solicitar apoyo no te hace incapaz, por el contrario, te hace responsable, sobre todo si eres madre o padre primerizos.
Prioriza y delega, organiza tus tiempos y prioriza tus actividades, pues en este momento, lo más importante son mamá y bebé.
Expresa tus dudas o inquietudes, es normal que las mamás no sepan los comportamientos de los recién nacidos, así que si notas algo extraño en tu pequeño no dudes en consultar al médico.
Puedes enfocarte únicamente en el cuidado de tu bebé, ya que esto es una de las responsabilidades más demandantes y absorbentes que existen, por lo tanto, está bien enfocarnos al cuidado de nuestro pequeño, después ya habrá tiempo para todo lo demás.
Sé amable con tu cuerpo, en el parto el cuerpo pasa por muchas transformaciones, y es normal tener secuelas físicas después embarazo.
Así que no seas dura con tu nuevo cuerpo y recuerda que dio vida, sé amable con él, ámalo tanto como lo amabas cuando llevaba a tu bebé dentro.
No te olvides de ti, si bien es cierto que toda la atención recae en el nuevo bebé, también lo es que debes mantenerte fuerte y sana en beneficio de tu pequeño. Recuerda que las prioridades son: mamá y bebé.
Sólo es una etapa, en esos momentos de desvelo y llantos interminables, recuerda que estas son etapas en las que vas a ir creciendo y aprendiendo con tu bebé.
La maternidad se aprende con la marcha, aunque ahora puedas sentir que no ves las cosas claras y que parece no tener fin, cuando menos lo esperes, esta etapa de recién nacido habrá terminado, así que recuerda ser paciente y disfrutarla.
