Xalapa, Ver
La costumbre de cortar escenas o motivos ornamentales en papel, es una actividad realizada días previos al Día de Muertos. Pero el papel picado va más allá de un simple adorno para la ofrenda dedicada a los fieles difuntos.
En los altares tradicionales se representaban a los dioses de la tierra, la lluvia, el agua, la agricultura y el Mictlán, mediante figurillas recortadas en papel amate.
En la actualidad ha sido sustituida por coloridos manteles de papel picado (papel de seda recortado) con motivos alegóricos a la muerte y los muertos. De representar a los dioses se ha pasado a representar a los difuntos.
Actualmente, el papel picado no sólo le da color a la ofrenda, sino que representa el aire, uno de los cuatro elementos que debe estar presente en cualquier ofrenda.
Cada papel picado tiene diferentes colores, los cuales se fueron adaptando a un nuevo rito, en tiempo de la evangelización.
El naranja, representa luto; el morado, se refiere a la religión católica; el azul, refiere a los difuntos que tuvieron una muerte relacionada con el agua; el rojo, es para los guerreros o mujeres que fallecieron durante el parto; el verde, es para los jóvenes; el blanco, para los niños: el amarillo, para los ancianos y el negro simboliza al inframundo.