El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el operativo en Culiacán en el que se ubicó a Ovidio Guzmán era "el inicio de una guerra" que "se logró detener en horas".
Tras presentar la línea de tiempo de cómo se desarrolló el operativo el 17 de octubre, el Presidente sostuvo que las decisiones que tomó el gabinete de seguridad fueron responsables y se lanzó contra los medios de comunicación por la exigencia de información inmediata "con tono acusatorio, poniendo a todos en el banquillo de los acusados".
Fue insistente en que las decisiones que se tomaron se dieron en pocas horas y en momentos muy complejos en los que se privilegió la vida de inocentes.
"Estábamos hablando casi del inicio de una guerra que se detuvo en horas, cuando querían que de inmediato se informara porque lo más importante es la nota ¡cuando no!, lo más importante son los ciudadanos y la paz. Ojalá nos sirva a todos esto porque mostraron el cobre y consideramos que se actuó bien, fue lo correcto, porque por encima de todo están las vidas", afirmó en conferencia matutina.
López Obrador criticó que se haya cuestionado que el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo, indicó, ese día por la noche, que encontrar a Ovidio Guzmán en ese inmueble fue "fortuito", pues dijo que "esa era la información que se tenía, pero se rectificó, no como antes, que todo era autocomplacencia".
Fuente: Milenio