Xalapa, Ver
Medios de comunicación presentaron este martes una entrevista con Miguel Ángel Félix Gallardo, quien en su momento fue considerado el narcotraficante más importante de México.
Después de 32 años, en silla de ruedas, sordo de un oído y ciego de un ojo, Félix Gallardo reapareció ante las cámaras desde el penal federal de Puente Grande, Jalisco.
Ante su estado de salud actual, el fundador del Cártel de Guadalajara explicó que considera ya no tener una condición de vida más longeva, pues reveló que perdió la mayor parte de sus sentidos.
“Yo soy un cadáver el cual no espera más que ser enterrado en la raíz de un árbol”, comunicó a los medios.
Finalmente, ‘El jefe de jefes’ compartió lo que ha vivido durante tantos años en prisión: “fui cercenado del estómago, me quitaron ocho hernias, me privaron de la vista, de los oídos y no puedo caminar".
La historia de Miguel Ángel Félix Gallardo es de suma relevancia para la el narcotráfico en México, pues fue el primero en traficar cocaína en Estados Unidos, además, estableció contactos con los narcotraficantes como Pablo Escobar Gaviria y Ramón Matta Ballesteros; diseñó y controló las principales rutas de trasiego de droga en el país.
Originario de Culiacán, Sinaloa, el también apodado como “El Padrino” estuvo en la extinta Policía Judicial Federal cuando era joven, y después se desempeñó como escolta de los hijos del ex gobernador de Sinaloa, Rodolfo Sánchez Celis.
Es tío de Sandra Ávila Beltrán, conocida como la "Reina del Pacífico", además se le vincula familiarmente con los hermanos Arellano Félix, fundadores del cártel de Tijuana, pero hasta el momento no reconoce parentesco con ellos.
Asimismo, se le anexó pertenecer al ‘Triángulo Dorado’, en Chihuahua, junto con Rafael Caro Quintero, Jaime Herrera Nevares y Miguel Ángel Félix, quien fue socio de Pablo Escobar.