Ante la crisis de sanidad que se vive en el mundo por el COVID-19, muchos sectores de la población se han visto afectados, tal es el caso de los trabajadores de la tercera edad de los distintos super mercados, los cuales son conocidos como "cerillitos".
Muchos de ellos fueron suspendidos de manera arbitraria, mientras que otros siguen laborando, sin embargo, ellos son de los grupos más vulnerables para el Covid-19.
Algunos de ellos hablaron de manera anónima y explicaron que para poder continuar trabajando deben seguir los protocolos, como el usar cubre bocas y guantes de plástico para evitar el contacto con superficies, así como con posibles infectados.
Por su parte, hicieron un llamado a la población a comprar de manera responsablemente y no caer ante el panico.
Además pesé a que se les ha dado la opción de quedarse y resguardarse algunos prefieren ir a trabajar pues las necesidades económicas que tienen no se detendrán también por el virus.